Kitesurfing? que kitesurfing ni ná … aquí estamos hablando de ventanas. La ventana de viento.
La ventana. Oye! La ventana! que cierres la ventana que aqui va a haber un portazo a cuenta de la corriente de aire!
La ventanaaaa, quieres abrir la ventana que aquí nos estamos asando de calor …
La ventana. No, no es de esa ventana de lo que estamos hablando, estamos hablando de la ventana de viento, y con ese concepto se pretende explicar el recorrido de una cometa desde que despega de un lado, el izquierdo mismamente, hasta que llega al otro lado, al opuesto, osea, haciendolo bien y cuidadosamente, en fin, nada de salir disparada -la cometa- hacia arriba, para aterrizar terrorificamente, tipo estampilla de correos, en el otro lado.
Esa ventana, debemos, en primer lugar, identificarla, para lo que, mirando hacia adelante, osea hacia donde el viento viene y con unos graciosos giros de la cara a izquierda y derecha, nos daremos cuenta al cabo de un momento que en una de nuestras orejas, no notamos aire, y luego, tal como giramos la cabeza en sentido contrario, es la oreja situada al otro lado de nuestra cara donde no estamos sintiendo ningún viento.
Pues bien, repitiendo este movimiento rapidamente -pero no a lo loco- notaremos que nuestra nariz, apendice infravalorado donde los haya, en muchos casos, nos esta indicando la dirección en tiempo real de donde el viento viene. Reconocido este punto y trazando con nuestro dedo una linea que señale la dirección del viento llegante, cruzando otra linea trazada igualmente con el mismo dedo que antes, cruzando la trayectoria de la anterior linea y que, por último, subiéndonos simetricamente sobre esta ultima, y extendiendo ambos brazos a los lados de nuestro cuerpo, ello nos indica la ventana de viento.
Una vez esclarecido el asunto, deberemos notar que todo lo que se encuentra frente a nosotros es la zona de potencia, o dicho de otra manera, como la cometa pase de ese circulo imaginario trazado sobre nuestras cabezas hacia adelante, ahí empiezan tus problemas de verdad, porque, a distintas velocidades y en distintos grados de arrastrón, vamos a salir catapultados hacia adelante, las más de las veces a lo bestia, pero bestia bestia.
De ello se deduce la precisión, inmediatez y dulzura con la que deberemos manejarnos a la hora de subir, bajar y abanicar la cometa, haciendo esto ultimo caso de que sea el caso, preferiblemente no en la playa sino agua adentro, a ser posible, y, ya digo, dulcemente, muyyyyy dulcemente, nada de zarpazos voluntarios o involuntarios pues con ello solamente se consigue salir volando y el posterior arrastrón, que en función de la intensidad de viento puede hacer que nos vaya bien … regular, mal, muy mal o terriblemente mal.
A mayor recorrido del kite en la ventana de viento, mayor impulso recibiremos, si a ello se añade el tirón barraabajo que muchas veces suele acompañar a lo de pasar el kite de un lado al otro de la ventana ahí tenemos ya el coctel perfecto para poder acabar en el departamento de traumatología más próximo al lugar de los hechos.
Eso si, ya aleccionados y entrenados convenientemente por la escuela de kite preparada a tal efecto, autorizada por las autoridades pertinentes y en el lugar -acuífero obviamente- apropiado para la concatenación de hechos que han de acompañar a la experiencia, seremos, o mejor dicho, seríamos capaces de levantar el kite exitosamente, recular lo mas posible para poner la mayor candidad de agua y de distancia entre la orilla y nosotros y ahí darnos a la delicada tarea de intentar levantarnos en la tabla.
Con este fin, debo hacer notar que, si se trata de levantarse hacia la izquierda, deberíamos aparcar momentáneamente la cometa a eso de las dos para enviarla hasta las 11, o las 10 y media, pero eso ya con mas cuidado aún si cabe, dado que el impulso que recibamos va a ser bastante mayor.
Si fuera ello con intención de levantarnos hacia la derecha, ahí el recorrido del kite debería ir de las 11 hasta las 2 o 2 y media, osea lo mismo que antes pero para el otro lado. Y, una vez ya navegando, es importante saber que si vamos abanicando el kite de las 9 y media hasta las 11, o bien si lo aparcamos, porque el viento lo permite, lo más próximo a las 9 y media, conseguiremos con ello el mayor ángulo de ceñida … y obviamente, mismo resultado en el otro lado entre la 1 y las 2 y media.
Pues ale! salud y suerte … y mucha memoria, sobre todo, para evitar resultados indeseados.
LA VENTANA DE VIENTO – Kitesurfing school Mallorca